Guzugubolo y sus poderes mágicos

¿Cuándo has visto un héroe en silla de ruedas? Guz es un niño muy especial.

Vive encerrado en su cuarto, porque pensaba que no podía hacer nada debido a que tenía una discapacidad.  Su madre todos los días le recuerda que él es su Guzugublo y que no hay nadie como él.  Guz refunfuñaba cuando su madre lo llamaba Guzugubolo. Hasta que un día todo cambió para Guz. Un regalo de amor de su madre hizo que empezara a ver la vida diferente. Tanta fue la emoción de ese gran acontecimiento, que esa noche, se convirtió en el protagonista de su propio sueño.

En el mismo era un superhéroe, porque hacía cosas maravillosas. Visitaba planetas y ayudaba a preservarlos, era reconocido como el salvador de los planetas. En una de sus tantas aventuras, visitó un planeta muy peculiar… Allí conoció a alguien especial que era diferente como él. Guz le repitió las palabras que su madre le decía: ¡No hay nadie como tú!

Con esta historia su autora quiere enfatizar que todos en cierta manera somos superhéroes, ya que pasamos por diferentes situaciones, que nos hacen ser más fuertes. El mensaje que desea llevar a todos los niños es que, pueden lograr todos sus sueños, reconociendo que todos somos diferentes, pero todos merecemos las mismas oportunidades.

Esta lectura llena de aventuras maravillosas fomenta la inclusión, la diversidad, la igualdad, la motivación, el cuidado del ambiente, el trabajo en equipo, amor y la empatía entre otras cosas.

Guzugubolo descubre sus poderes a través de sus sueños, eso le dio seguridad y autovalía. Se dio cuenta que podía hacer todas las cosas que quisiera, pero de otra manera, que nadie lo juzgaría por ser diferente y que el amor y apoyo, resulta primordial para lograr las metas.

Guz, ya no era Guz, ahora era Guzugubolo, el mascaracachimba y salvador de los planetas, conoció amigos y se conoció a sí mismo.

En la segunda edición siguen las aventuras. Guz y sus amigos ayudan y cuidan el ambiente, reciclan y reutilizan materiales. Pero, la historia se complica cuando Guz no sabe si una experiencia muy personal se convierte en algo real.